"CONDIMENTACIÓN HUMORÍSTICA” DE TEXTOS CIENTÍFICOS GEOLÓGICOS EN INGLÉS

 

Miguel de las Doblas. Instituto de Geociencias, CSIC-UCM, Ciudad Universitaria, Madrid. doblas@mncn.csic.es


RESUMEN

En este trabajo, introducimos el novedoso concepto de “condimentación humorística” (“Spicing”) de textos científicos geológicos escritos en inglés y para ello desarrollaremos las siguientes cuestiones: 1) Definición de “condimentación humorística” de textos científicos. 2) Recursos que se utilizan en la “condimentación” de manuscritos geológicos; 3) Secciones del artículo geológico donde se utilizan. 4) Objetivo que cumple este recurso dentro de los escritos científicos geológicos. 5) Tipo de comunicaciones científicas donde se introducen estos recursos (revistas, libros, congresos, etc.).  6) Público y publicaciones a los que van dirigidas estas “condimentaciones”.  7) Predominio de estos recursos entre los autores anglo-sajones. 8) Antecedentes existentes en la sistematización de la “condimentación” científica de textos geológicos.  9) ¿Constituyen estos recursos auténticas técnicas de marketing? 10) Longitud del texto científico geológico.



            En primer lugar, nos gustaría resaltar que el término "condimentación humorística" que utilizamos  no parece muy afortunado por sus connotaciones teóricamente culinarias en español. Sin embargo, es la traducción del término inglés "spicing science" que refleja a la perfección el concepto que queremos describir. Por ello pensamos que debemos utilizar esta traducción, aunque no sea excesivamente afortunada en español. Vamos ahora a explicar lo que entendemos por  "condimentación humorística” de textos científicos geológicos (CHG). Se trata basicamente del difícil "arte" de introducir en el texto científico riguroso, una serie de recursos que permiten  "sazonar y aligerar" la pesada carga de los argumentos y datos que se pretenden exponer y demostrar, y que resultan a menudo tediosos, aburridos, agrios e impersonales ("dry science").

 

Quisiéramos puntualizar que la utilización de los diferentes recursos de la CHG no se restringe en absoluto a las ciencias Geológicas y de hecho abarca la mayoría de las ramas de la ciencia (aplicada, experimental, teórica, social, humanística). Sin embargo, nosotros nos centraremos  en el análisis de la  CHG en geología, ya que llevamos décadas trabajando en esta especialidad científica que nos es familiar y fácilmente accesible.

El objetico de utilizar la CHG en las textos científicos es que se trata de una técnica de "informalización" ocasional del manuscrito que proporciona al lector un “condimento" de frescura que se esparce a lo largo del manuscrito mediante "pizcas" de elementos informales que permiten "adornar" con pinceladas de humor, ironía, juegos de palabras, acrónimos, expresiones coloquiales, o viñetas humorísticas el áspero texto científico (entre otros muchos recursos de la CHG). Con ello, se reaviva el interés del lector, que recibe una bocanada de aire fresco inesperada, dentro del manuscrito que trata de digerir a duras penas, sin que por ello pierda éste un ápice del rigor científico que debe mantener. La CHG distrae positivamente (pero brevemente) la atención del lector, ayudándole a retomar la lectura de los argumentos científicos con renovada energía.

Asimismo, algunos de los recursos de la CHG constituyen auténticos sistemas nemotécnicos de gran eficacia ya que permiten que el lector retenga un concepto que de otro modo sería casi imposible de memorizar por su complejidad. Este es el caso de ciertos tipos de abreviaciones sabiamente escogidas por tener significado propio: ej., la hipótesis "southwestern United States-Antarctic" sobre la reconstrucción paleogeográfica de supercontinente de Gondwana en el Paleozoico inferior , también denominada "SWEAT". Parece obvio que todo el mundo recordará con facilidad  y bastante humor la hipótesis "sudor" o "SWEAT", cosa que no ocurre con el concepto desarrollado en su totalidad que incluye varias palabras complejas y sin aparente ligazón lógica.


Otro de los objetivos perseguidos por la CHG es la de “provocar” algún tipo de reacción en el lector del artículo. Así, es notorio que el “leiv motiv” defendido por los editores de la revista Geology para los artículos que pretenden publicarse en la misma es que “Geology articles should be short, innovative, PROVOCATIVE, and of interest to a broad audience” (ver por ejemplo el número de Enero de 1988 de esta revista, en su sección sobre “Information for Contributors to Geology”). Como ya hemos mencionado, la famosa revista Geology se caracteriza por utilizar como reclamo en su portada una selección de títulos telegráficos de artículos que contiene, potenciando la utilización de chocantes titulares informales y condimentados que ellos denominan “teasers” o “provocadores” (comunicación personal del Dr. D.E. Fastovsky, coeditor de esta revista). En este sentido, es curioso comprobar que para los geólogos americanos, el hecho que un artículo publicado en esta revista (o en otras) haya suscitado polémica siendo criticado por otros autores (estas cuestiones aparecen en la sección “Comment & Reply” de la misma revista) se considera positivo ya que provocó respuestas en el auditorio científico (a veces muy duras e informales). Algo innovador y provocador tiene ese manuscrito y es lo que se espera de una contribución científica. Sin embargo, es curioso también comprobar que en España ocurre justo lo contrario ("Spain is different") y el solo hecho que un artículo publicado en una de estas revistas haya suscitado un “Comment & Reply” por parte de otros geólogos, parece que invalida el artículo polémico en la mente de muchos científicos españoles. Esto se argumenta con frecuencia en lasoposiciones que tienen lugar en España a la hora de juzgar las publicaciones de un candidato (tenemos una amplia  experiencia personal en este sentido). Básicamente, el concepto que aplican muchos de estos evaluadores se basa en la siguiente “ecuación mental”: artículo X del candidato Y publicado en la revista Z= 1 punto. “Comment & Reply” al artículo X del candidato Y publicado en la revista Y= -1 punto. ¡El sorprendente resultado final de la evaluación es que el candidato Y obtiene 0 puntos por su artículo X publicado en la revista Z! Esto es independiente del hecho que la revista Z pueda ser la número uno en la sección de geología del SCI, y que para publicar su artículo el candidato Y tuvo que pasar previamente otra “oposición científica” probablemente mucho más dura y a buen seguro más objetiva, compitiendo ferozmente con otros artículos que inundan la revista, y luchando en franca lid con editores y referees.

Esta teoría de la "provocación" mental está maravillosamente expuesta en el libro de Roger Von Oech (1990) "A whack on the side of the head" que trata sobre el poder del pensamiento creativo y como éste se puede potenciar con una serie de "collejas mentales" cuyo objetivo es "despertar" la creatividad. Este libro debería figurar en la biblioteca particular de todo  investigador y también debería ser un texto obligatorio en las diferentes carreras (científicas o no), así como en los institutos. Utilizando estas nociones, pensamos que los recursos de la CHG provocan en el lector una interrupción momentánea en el fluir normal del análisis del texto científico geológico y pueden despertar pensamientos creativos alternativos. Asimismo, el autor que utiliza la CHG demuestra una creatividad despierta y se convierte en un "head-whacker" según la denominación de Von Oech (1990). Todo investigador debe aspirar a convertirse en un "head whacker", no solo con ideas científicas novedosas y provocadoras bien sustentadas, sino con la utilización ocasional de los diferentes recursos de la CHG en sus textos.


Según Von Oech (1990) la creatividad queda a menudo bloqueada en las personas y no llega a aflorar porque tenemos una serie de "mental locks" (bloqueos mentales) que nos han inculcado desde pequeños, en la escuela, en la universidad y en la sociedad en general. Algunos de estos "mental locks" que nos impiden pensar "algo diferente" de vez en cuando  son los siguientes (Von Oech, 1990): 1) solo existe una respuesta correcta que es la que debemos encontrar; 2) debemos huir en nuestros razonamientos de lo que no es lógico; 3) debemos seguir las reglas preconcebidas por el pensamiento social aceptado; 4) hay que ser prácticos e ir "al grano" que "el tiempo es oro"; 5) divertirse y/o jugar es algo frívolo incompatible con el pensamiento y el trabajo; 6) esto que quiero abordar se aparta de mi área de trabajo o especialidad y por lo tanto no lo considero; 7) se debe evitar a toda costa la ambigüedad y la claridad debe imperar; 8) se debe huir de las "locuras mentales” que surgen a veces; 9) equivocarse es lo peor que nos puede suceder "err is wrong", y por lo tanto no merece la pena arriesgarse; 10) yo no soy creativo, así que para que molestarse.

Una de las mejores frases acerca de la creatividad mental es la del premio Nóbel Albert Szent-Györgyi: "Discovery consists of looking at the same thing as everyone else and thinking something different" (en Von Oech, 1990, p. 7).  La mayoría de la gente encuentra solo aquello que está buscando y si alguna respuesta no cuadra con el objetivo nos olvidamos de ella porque esa no es "the right answer". De hecho este "mental lock" es de lo más nefasto como lo expresan el filósofo francés Emile Chartier "Nothing is more dangerous than an idea when it's the only one you have" (en Von Oech, 1990; p. 26) o el premio Nóbel Linus Pauling "The best way to get a good idea is to get a lot of ideas" (en Von Oech, 1990; p. 28). En palabras de Von Oech (1990), se trata de "setting our mental channel", desarrollando la habilidad de olvidarnos momentáneamente de lo que conocemos, y dejar nuestra mente liberada de los "mental locks" para permitir que fluyan ideas distintas de las "ready-made answers" que obedecen a la "one-idea tendency".  El problema es que las ideas nuevas (o al menos diferentes) no suelen tener una buena e inmediata aceptación en la gente y como afirma el científico W.I. Beveridge "The human mind likes a strange idea as little as the body likes a strange protein and resists it with a similar energy" (en Von Oech, 1990; p. 82).


La pregunta clave que se plantea Von Oech (1990) es por qué puede resultar interesante para uno mismo ser creativo (a parte las obvias razones comerciales o de promoción). Existen dos buenas razones según este autor: 1) la primera es el cambio; al cambiar las cosas con el tiempo y entrar cada vez más información, ya no es posible resolver los problemas actuales con las soluciones de antes. 2) La segunda buena razón para generar ideas nuevas es que esto constituye una fuente de diversión, e incluso este autor se atreve a sugerir que el pensamiento creativo representa "the sex of our mental lives". Este segundo punto enlaza perfectamente con uno de los objetivos principales que persigue un autor de un texto geológico a la hora de introducir alguno de los recursos del CHG en su manuscrito: poner pinceladas de humor dentro de su discurso científico que ayuden a relajar la tensión de la lectura/comprensión de su razonamiento. Como hemos mencionado, uno de los principales "mental locks" que interfieren en el desarrollo de una mente creativa completa es la falsa creencia de que la diversión o el juego son incompatibles con el trabajo, estudio o investigación serias, es decir que es una frivolidad (Von Oech, 1990). Pero se viene demostrando desde hace algún tiempo que una "playful" actitud es fundamental para el pensamiento creativo, y precisamente se piensa que a los niños se les da muy bien el juego porque desconocen la mayoría de los "supposed to's" o las supuestas reglas que se deben aplicar (Von Oech, 1990). Como diría el filósofo chino Lao Tze "As soon as you made a thought, laugh at it" (en Von Oech, 1990; p. 91). El sentido del humor tiene varios efectos en la creatividad (Von Oech, 1990): 1) Permite que nuestro pensamiento se "estire" buscando respuestas o sentidos insospechados, como cuando intentamos "captar" algún chiste complicado; 2) El humor nos fuerza a combinar ideas que usualmente no se asociarían unas con otras y por ello este tipo de pensamiento se encuentra también  en el corazón de la creatividad; 3) El humor nos permite tomarnos las cosas menos en serio, y si uno es capaz de reírse de algo, entonces será capaz de desafiar las reglas y a lo mejor podrá pensar en alternativas a las hipótesis preconcebidas. Como dice Von Oech en una frase genial: "there is a close relationship between the "haha" of humor and the "aha!" of discovery" (Von Oech, 1990; p. 93).


 La mayoría de los científicos tienen una forma de pensar y razonar que se puede definir como "hard thinking" (lógica, precisa, exacta, específica y consistente) mientras que solo algunos son capaces también de abarcar el "soft thinking" (metafórico, aproximado, divertido, y capaz de utilizar la contradicción; Von Oech, 1990). Este segundo tipo de forma de pensar es la que caracteriza a la persona que es capaz de convertirse de vez en cuando en un "head whacker" y desbloquear las "mental locks". Lo ideal es que un científico sea capaz de mantener en su discurso científico puramente deductivo/inductivo una linea "dura" pero que también permita de vez en cuando algún episodio "blando" dentro de su discurso. Ese es el principal objetivo de la utilización de la CHG en el texto científico, como hemos dicho ya muchas veces.

Como veremos más tarde, uno de los recursos más utilizados en la CHG es la "metáfora", y la clave del pensamiento metafórico es la similaridad. Según Ortega y Gasset "The metaphor is probably the most fertile power possessed by man" (en Von Oech, 1990; p. 44). Las metáforas son muy efectivas a la hora de hacer que las ideas complicadas se tornen más fáciles de entender. La clave radica en el hecho que la metáfora es una excelente herramienta para ayudar al lector a "pensar algo diferente" (Von Oech, 1990). Si aparece un problema de difícil solución, se puede intentar establecer una metáfora, y esto nos proporcionará una visión fresca y nueva para encontrar una salida al mismo (Von Oech, 1990).

Otra de las máximas del pensamiento creativo es que el investigador o artista que pretende ser novedoso debe ante todo atreverse a  "challenging the rules", ya que como bien expresaba Pablo Picasso "Every act of creation is first of all an act of destruction" (en Von Oech, 1990; p. 57). Es indudable que casi cualquier avance importante en arte, medicina, agricultura, ingeniería, marketing, política, educación, o diseño ha ocurrido casi invariablemente cuando alguien se atrevió a "desafiar las reglas" proponiendo una nueva visión del problema (Von Oech, 1990). En resumen, podríamos escribir en letras de molde la siguente frase recogida por Von Oech (1990), a nuestro entender modélica: "Every rule here can be challenged except this one". 

Una de las técnicas más útiles como regla a aplicar por los pensadores creativos consiste en lo que denomina Von Oech (1990) el "what-iffing", es decir la facultad de preguntarse de vez en cuando "que pasaría si", es decir, desafiar lo que comúnmente se acepta. El solo hecho de preguntarse de vez en cuando "what if" es una sencilla pero poderosa manera de mantener despiertos los resortes de la imaginación (a menudo oxidados), olvidando por un instante  las ideas o reglas preconcebidas, permitiendo de esta manera que surjan  creaciones nuevas y originales. En resumidas cuentas, el ejercicio de "what-iffing" consiste básicamente en encender ocasionalmente el pensamiento creativo paralelo que es capaz de desafiar las reglas preestablecidas sin ruborizarse por ello. Sin embargo, la sociedad actual está excesivamente centrada en el "culto al cuerpo" con técnicas de mantenimiento "fitting, footing, etc.." o reparación "lifting" corporal, en detrimento de ejercicios mentales como el "what-iffing" que serían de gran utilidad para complementar los otros ejercicios y así verificar la conocida máxima: "Mens sana in corpore sano". 

Las ideas provocativas que estimulan el pensamiento creativo las denomina Van Oech (1990) "stepping stones", es decir piedras que nos hacen tropezar inesperadamente en el camino, que al igual que los "head-whackers" son una llamada de atención que nos desvía momentáneamente de nuestro camino rutinario para aventurarnos hacia sendas más imaginativas y creadoras.

      Los destinatarios principales de estos mensajes informales dentro de un texto, por otra parte totalmente serio, son los diferentes miembros de la comunidad científica, investigadora y docente asociados a los Institutos, Universidades y centros de investigación privados, estatales o de las industrias. En definitiva, se trata de “despertar” a la comunidad científica que necesita consultar la bibliografía más reciente y relevante sobre los últimos avances en ciencias geológicas. 

Es interesante señalar también que hoy en día se deberían potenciar estas técnicas de "condimentación de la ciencia" incluso a nivel de los Institutos de Educación Secundaria: "I feel that we need to bring humanity into the subject (physics) at al levels: humour, connectedness to the human race, and more humility; we need to appear less smug and know-it-all. We have lost the wonder of our subject, the awe for the whole universe around us and our interrelationship with it" (Branson et al., 1998). De hecho, la famosa idea de Einstein de que "la imaginación es más importante que el saber en ciencia" no se suele reflejar en las clases de los institutos (Branson et al., 1998). Como expresan estos autores, "One of our tasks as teachers of physics, is to give our students as enjoyable an experience as possible while they absorb the basic facts of what they perceive as a difficult and possibly unrewarding subject"  (Branson et al., 1998). Nos parece que esta frase debería aparecer en un cartel en el panel de la entrada de los centros de investigación en Ciencias de la Tierra (cambiando "teachers of physics" por "researchers in geology"), ya que describe perfectamente los objetivos que debe cumplir un geólogo cuando escribe su artículo, y por ello debe tomar conciencia de la necesidad de utilizar algunos de los recursos que la CHG pone a su disposición.

Asimismo es común la introducción de numerosos recursos de la CHG en textos geológicos con un carácter más divulgativo destinados al público en general. Algunas de las revistas divulgativas que incluyen estos recursos en sus páginas son “Scientific American”, “National Geographic”, "Reader's Digest", etc...

 


Resulta notable que los autores anglo-sajones, y en particular los americanos, no parecen tener ningún reparo en utilizar la CHG, cosa que no ocurre con los autores hispano-hablantes. Esto se debe probablemente a una cuestión cultural, ya que los americanos son en general mucho más informales, tanto en la vida diaria, como en los ambientes académicos y científicos. Por ejemplo, en España, sería impensable que un catedrático impartiera sus clases en "chanclas" y pantalones cortos, sentado sobre su mesa con las piernas apoyadas en el regazo de su sillón, con un "coffee mug" en la mano, dictándole a sus alumnos una amena clase sobre los "elementos radiogénicos presentes en la litosfera continental Arcaica de Australia". Sin embargo, este catedrático o "professor", es seguramente una de las grandes eminencias mundiales en esta especialidad; tengo la experiencia personal de esta realidad durante mis estancias en Harvard, el MIT y el ETH. Esta informalidad típicamente americana abarca todos los aspectos de la investigación científica que desarrollan: 1) En los congresos internacionales de primera fila: la asistencia a los mismos con una indumentaria de tipo "casual-wear"; la abundante utilización de términos, diapositivas o transparencias "informales" en sus presentaciones; los "coffee-breaks", que afortunadamente impusieron ellos. 2) En los artículos que publican en las mejores revistas o libros que aparecen citados en el “Science Citation Index (SCI)”, con la inclusión de abundantes recursos de la CHG. 3) En las más prestigiosas revistas o libros editadas en los Estados Unidos (y ocasionalmente en Inglaterra), donde a menudo se potencia la utilización de estos recursos por parte de los editores. Por ejemplo, la revista mensual Geology de la Sociedad Geológica Americana (una de las primeras en el SCI), incluye como reclamo en su portada una selección de títulos telegráficos de artículos que aparecen publicados en el número correspondiente, modificados drásticamente con la utilización de llamativos recursos lingüísticos de la CHG. La famosa revista Nature (la número uno en ciencias, junto con Science), utiliza también a menudo las diferentes variantes de la CHG a la hora de anunciar importantes hallazgos científicos, incluido por supuesto el campo de la geología.

 


     Esta técnica de "condimentación informal y ocasional" dentro del texto científico riguroso se viene empleando implicitamente en la literatura geológica desde hace varias décadas, pero lo sorprendente es que explicitamente no se haya establecido un campo de doctrina sobre el particular, y nadie haya intentado analizar, clasificar, y divulgar los diferentes recursos "informales" de la CHG que pueden ser utilizados por el geólogo a la hora de escribir su artículo.

En este sentido, creemos que el tema que se aborda en este trabajo es totalmente novedoso y la recopilación de los diferentes recursos de la CHG que pretendemos exponer, puede ser de gran utilidad tanto para los investigadores noveles, como para científicos de larga tradición que no han contemplado la utilización de estos recursos, quizás por su formación más clásica que considera que este tipo de elementos "acientíficos" desvirtuaría la seriedad de sus contribuciones. Que sepamos, no existe ningún otro trabajo publicado que aborde el estudio sistemático de esto recursos de la CHG.

El término "spicing" ha sido raramente aplicado a las ciencias y no se corresponde con lo que nosotros planteamos. "Buzeando" en la red, e introduciendo esta palabra clave, además de la multitud de referencias relativas al arte culinario, solo aparecen algunas citas relacionadas de algún modo con el campo científico, pero en un contexto diferente. Se habla por ejemplo de "This goes beyond spicing up texts with occasional references to indeterminacy or the cold-fusion debate" (Branson et al., 1998), refiriéndose a la introducción ocasional de referencias sobre conocidos conceptos físicos en  novelas contemporáneas, una práctica que se ha hecho muy habitual, como puntualizan estos autores: "Novelists are once again using contemporary science to give metaphorical underpinning to their work". 

  

Es innegable que los recursos de la CHG tienen mucho que ver con las técnicas de "marketing publicitario". No nos engañemos, publicar hoy en día constituye una auténtica lucha sin cuartel, y se trata de "vender nuestro producto al mejor postor", es decir a las revistas de alto impacto del SCI que son leídas y citadas por los mejores científicos del mundo. La denostada visión decimonónica del ilustre científico lunático, aislado, y dedicado en cuerpo y alma a su especialidad, tiene poco que ver con la realidad de nuestros días, donde el geólogo (además de investigar) debe pelearse como una fiera con editores y referees para publicar sus ideas, siempre en despiadada competencia con otros autores ávidos del escasísimo espacio que ofrecen las revistas punteras del SCI. El proceso de preparar un texto geológico para enviarlo a una revista del SCI constituye una auténtica "aventura de publicar". Para ello, el investigador debe perder gran cantidad de tiempo en labores extracientíficas, aprendiendo a vender su producto para sobrevivir ("publish or perish") ateniéndose implicitamente a las "comerciales" reglas del marketing publicitario, apartándose con ello de sus habituales  quehaceres puramente científico-investigadores. Sin embargo, la mayoría de los científicos no están familiarizados con los conceptos del "marketing publicatorio" y por ello pierden numerosas oportunidades en las duras "oposiciones perpetuas" de ingresar en el selecto club privado de l@s "SCI-boys-&-girls". En nuestra opinión, no cabe duda que los recursos de la CHG constituyen auténticas técnicas de marketing que se utilizan implícitamente pero que no están explicitadas en ningún manual y de hecho pueden marcar la diferencia crucial a la hora de publicar nuestro artículo de manera exitosa.


  

El famoso "KISS principle" ("Keep it  Simple and Stupid") sugiere muy acertadamente que lo mejor que podemos hacer para exponer una idea científica (y que nos entiendan) es hacerlo de manera concisa, clara, e incluso sencilla. Está claro que esta regla no le serviría a un novelista para  obtener el premio Nobel, pero en ciencia conseguir escribir artículos cortos y concisos representa una gran ventaja para el atareado lector (editor, referee, o investigador) que se encuentra al otro lado y que probablemente tiene la mesa repleta de correo urgente o artículos científicos esperando ser leídos y absorbidos (Ballin, 1984). En algunos idiomas, la palabra "simple" equivale mentalmente a "primitivo", pero cuando se trata de comunicar ideas y conceptos, la simplicidad resulta una auténtica virtud (Ballin, 1984). Una de las mejores frases referente a la longitud ideal de un artículo científico es la de B. Pascal, que fue reproducida por la revista Geology en la década de los 80 en la sección informativa inicial de la revista para los potenciales autores de artículos, como una regla ideal a seguir: "I would have written a shorter letter if I had had more time". Lo que parece un contrasentido es una realidad ya que cuesta mucho más tiempo y esfuerzo sintetizar un artículo en pocas páginas manteniendo la claridad de las ideas y conceptos, que hacerlo mediante un texto largo y tedioso que profundiza en detalles irrelevantes y que al final nos hace perder el hilo conductor de las principales ideas que se quieren exponer y defender. En español existe un conocido refrán popular que es perfectamente aplicable a la cuestión de la longitud de los textos científicos: "Lo bueno y breve dos veces bueno".


 

(N.B.: Texto provisional que no incluye de momento la Bibliografía)













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